Trump y Putin inician llamada directa para explorar salida diplomática a guerra en Ucrania

Galeria: Diálogo Trump-Putin y perspectivas sobre guerra en Ucrania

    En un giro significativo para la diplomacia internacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, entablaron este lunes una conversación telefónica directa con el objetivo de abordar la guerra en Ucrania, que ya se extiende por más de dos años.

    La llamada tuvo lugar en la mañana del 19 de mayo, según confirmó un alto funcionario de la Casa Blanca, que habló bajo condición de anonimato. La conversación representa el primer contacto formal entre ambos líderes en relación con el conflicto ucraniano desde que Trump asumió su segundo mandato en enero.

Trump: "Cansado y frustrado"

    Más temprano, la vocera presidencial Karoline Leavitt había adelantado que el mandatario estadounidense se siente “cansado y frustrado con ambas partes”, y que su prioridad es “ver este conflicto llegar a su fin”.

“El presidente Trump quiere resultados. Está cansado de conversaciones diplomáticas que no llevan a ninguna parte”, declaró Leavitt en rueda de prensa.

    La postura de Trump marca un cambio con respecto a la política de su antecesor, quien promovía una línea más firme hacia Moscú y un respaldo militar constante a Kiev. En contraste, el actual presidente ha planteado revisar los compromisos internacionales de EE. UU. y buscar una resolución más pragmática.

Objetivo: abrir vía de negociación

    Aunque la Casa Blanca no ha revelado detalles del contenido de la conversación, fuentes diplomáticas aseguran que el diálogo telefónico pretende abrir una vía de negociación bilateral entre Washington y Moscú, paralela a los canales multilaterales como la ONU y la OSCE.

    El conflicto en Ucrania permanece estancado militarmente, con frentes congelados en el este del país, y una población civil que continúa padeciendo los efectos de los ataques, la escasez energética y el desplazamiento interno. Los intentos anteriores de mediación, impulsados por países europeos, no han logrado avances sustanciales.

Presiones internacionales por una salida

    El acercamiento entre Trump y Putin ocurre en un contexto de creciente presión internacional para una salida negociada. Las potencias europeas, particularmente Alemania y Francia, han expresado su apoyo a cualquier iniciativa que permita detener la violencia y abrir el diálogo.

    Incluso China ha emitido un comunicado en el que respalda las conversaciones bilaterales, siempre que se respeten los principios de soberanía territorial y no injerencia.
Por su parte, la ONU ha celebrado el contacto como un primer paso positivo, aunque advirtió que cualquier proceso de paz debe incluir a Ucrania como parte central del diálogo.

Zelenski no ha sido consultado, por ahora

    Hasta el momento, Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, no ha sido incluido en las conversaciones, lo que ha generado inquietud entre aliados europeos y ucranianos. Voceros del gobierno de Kiev han afirmado que cualquier acuerdo sin su participación carece de legitimidad.

    La administración Trump ha evitado comentar sobre si habrá o no una futura inclusión de Zelenski en estas negociaciones. Sin embargo, fuentes cercanas a la Casa Blanca indican que se exploran “múltiples escenarios” y que la llamada con Putin es solo “el primer paso” de un proceso más amplio.

Implicaciones geopolíticas

    El contacto directo entre Trump y Putin puede redefinir el equilibrio de poder en Europa del Este. De concretarse una mesa de negociación liderada por Estados Unidos y Rusia, podría marginarse a organismos multilaterales y a actores regionales clave, incluyendo a la Unión Europea y la OTAN.

    Este movimiento también ha sido interpretado como una muestra del estilo diplomático de Trump, basado en contactos personales y acuerdos bilaterales por encima de los procesos tradicionales. Analistas destacan que este tipo de diplomacia conlleva riesgos, especialmente si no cuenta con consensos amplios.

Conclusión: diálogo en fase inicial

    Por ahora, la llamada entre Trump y Putin representa un intento preliminar de romper la parálisis diplomática en torno a la guerra de Ucrania. Si bien el contenido sigue siendo reservado, el solo hecho del contacto directo entre ambos líderes marca un giro importante en el escenario internacional.

    El éxito o fracaso de este diálogo dependerá en gran medida de la inclusión de Ucrania, el respaldo internacional y la disposición real de Moscú y Washington a comprometerse con una solución viable al conflicto más prolongado en suelo europeo desde la Segunda Guerra Mundial.