Aceptación y popularidad de Claudia Sheinbaum alcanzan el 77% a un mes de iniciar su gestión

    El 1 de octubre de 2024, Claudia Sheinbaum Pardo hizo historia al convertirse en la primera mujer en asumir la presidencia de México. Este evento fue celebrado por diversos sectores de la población, especialmente por aquellos que abogan por la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en el ámbito político. Un mes después de este significativo acontecimiento, la empresa encuestadora FactoMétrica reveló que la aceptación de la presidenta se sitúa en un impresionante 77%.

    Este alto porcentaje de aprobación se atribuye a los programas sociales que Sheinbaum ha impulsado desde el inicio de su gestión. Entre estos, destaca la Pensión a Mujeres de 60 a 64 años, así como diversas iniciativas desarrolladas por la Secretaría del Bienestar. Estas acciones han resonado profundamente en una población que enfrenta desafíos significativos en materia de pobreza y desigualdad social. Según la misma encuesta, un 67.9% de los ciudadanos apoyan las políticas de Sheinbaum bajo la premisa de que, por el bien de todos, primero los pobres.

    Sin embargo, a pesar de este respaldo mayoritario, existe un 32.1% de la población que aún no aprueba las acciones emprendidas por la presidenta. Este porcentaje revela que la aceptación no es absoluta y que hay un sector de la sociedad que sigue esperando más de su gobierno. Aun así, la aceptación del 77% es un claro indicativo de que muchos mexicanos ven en su liderazgo una esperanza para abordar los problemas que han afectado al país durante años.

    En el ámbito de la seguridad, Claudia Sheinbaum y su equipo, encabezado por el Secretario de Seguridad Pública Ciudadana, Omar García Harfuch, han presentado cuatro ejes fundamentales en su estrategia de seguridad. Esta estrategia ha sido bien recibida, generando un 54% de aprobación entre la población, lo que sugiere que los ciudadanos confían en su capacidad para abordar este tema crucial.

     Es importante resaltar que la lucha contra la corrupción ha sido un pilar del movimiento político que Sheinbaum representa, heredado del expresidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO). En este aspecto, su gobierno ha sido evaluado y ha obtenido un 60.5% de aprobación en cuanto a sus acciones para combatir la corrupción, aunque un 39.5% de los encuestados no considera adecuadas estas medidas.

     Claudia Sheinbaum es una figura reconocida en el ámbito académico y político. Nació el 24 de junio de 1962 en la Ciudad de México y es doctora en ingeniería energética por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Su trayectoria incluye roles como docente e investigadora, así como su vinculación al partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena). Antes de convertirse en presidenta, Sheinbaum fue jefa delegacional de Tlalpan de 2015 a 2017 y jefa de gobierno de la Ciudad de México desde diciembre de 2018 hasta junio de 2023.

     El 2 de junio de 2024, Claudia Sheinbaum fue electa presidenta de México con más de 63 millones de votos, un hecho que no solo la posiciona como líder del país, sino que también representa un avance significativo en la representación de las mujeres en la política mexicana.

     En su primer mes de gobierno, la mandataria ha logrado captar la atención y el apoyo de diversas comunidades, especialmente aquellas más vulnerables. A medida que se afianza en su papel, el compromiso de Sheinbaum con la justicia social, el desarrollo sostenible y la lucha contra la pobreza será clave para su administración.

     A pesar de la popularidad que la acompaña, Claudia Sheinbaum se enfrenta a grandes retos. La expectativa de la ciudadanía sobre sus acciones y políticas es alta, y se requiere una respuesta efectiva para abordar la desigualdad que ha persistido durante décadas. La atención estará centrada en cómo su gobierno responderá a las críticas y cumplirá con las promesas hechas durante su campaña electoral.

     La historia de México está en un punto de inflexión, y la gestión de Claudia Sheinbaum es una oportunidad para reescribir el rumbo del país. Su capacidad para articular una agenda inclusiva y transparente será fundamental para mantener la confianza de la población y avanzar hacia un México más equitativo.