Reiki: técnica energética que equilibra el cuerpo, mente y emociones, mejorando nuestra salud
Archivado en: Otras Noticias
Multimedios Informativos| Fecha: 2024-11-06
La técnica de sanación conocida como Reiki continúa ganando popularidad en el Estado de México, destacándose como una alternativa eficaz para mejorar tanto la salud física como emocional de quienes la practican. Creada por el Maestro Mikao Usui en 1922, el Reiki tiene como objetivo principal el equilibrio energético del cuerpo, un proceso vital para quienes buscan una mayor armonía en su vida diaria.
Reiki significa "Energía Universal" y se basa en la canalización de esta energía hacia el cuerpo del paciente, a través de la imposición de manos en puntos específicos del cuerpo, como los chacras y los meridianos energéticos. Estos puntos, de vital importancia en la tradición de Reiki, son los que se encargan de regular el flujo energético del organismo. Sin embargo, cuando alguno de estos puntos se encuentra bloqueado o desequilibrado, pueden aparecer tanto enfermedades físicas como emocionales. La técnica busca precisamente restablecer el equilibrio energético para eliminar dichos bloqueos.
A través de un proceso de armonización y canalización de la energía universal, el paciente experimenta un estado de paz y calma profunda. Este estado se traduce en un bienestar integral, donde las emociones se equilibran y la salud física mejora. Los beneficios de Reiki no solo se limitan a la relajación; en muchas ocasiones, la práctica de esta técnica lleva a una transformación profunda de la persona, que se vuelve más consciente de sus desequilibrios y disfunciones, lo que abre el camino a la sanación.
¿Cómo funciona el Reiki?
Un ejemplo sencillo para entender cómo funciona el Reiki es pensar en cómo nos tocamos una parte del cuerpo que duele, sin pensarlo, para intentar aliviar el malestar. Este gesto tan natural tiene que ver con nuestra capacidad de autocuración. De forma similar, el Reiki utiliza la imposición de manos en áreas específicas, pero con un enfoque más estudiado y preciso, empleando símbolos universales que amplifican la energía sanadora.
Además, el Reiki trabaja de manera holística, lo que significa que no se limita a tratar únicamente los síntomas físicos, sino que aborda la causa raíz, equilibrando el cuerpo y la mente. Esta es una de las razones por las que muchas personas que buscan mejorar su bienestar en todos los aspectos de su vida recurren a esta técnica.
Durante una sesión, la persona suele permanecer tumbada y relajada, con los ojos cerrados, mientras el terapeuta aplica la energía sanadora en los puntos estratégicos del cuerpo. La experiencia, en su mayoría, es muy placentera, generando una sensación de tranquilidad y relajación profunda.
¿Qué beneficios ofrece el Reiki?
El Reiki es ideal para quienes padecen enfermedades físicas como dolores crónicos, insomnio, ansiedad o estrés. Sin embargo, sus efectos no se limitan solo a lo físico, también es muy efectivo para trabajar en el aspecto emocional. Las personas que experimentan desequilibrios emocionales, como depresión o miedos, pueden encontrar una herramienta poderosa en el Reiki, ya que actúa de manera integral sobre todas las dimensiones del ser humano.
Uno de los aspectos más importantes del Reiki es que no tiene contraindicaciones significativas, lo que lo hace adecuado para casi cualquier persona, independientemente de su edad o condición de salud. Sin embargo, es fundamental que los pacientes se comprometan a seguir ciertas recomendaciones después de una sesión, como beber abundante agua y descansar lo suficiente para que el cuerpo pueda procesar la energía correctamente.
El proceso de una sesión de Reiki
El proceso de una sesión de Reiki generalmente dura entre 45 minutos y una hora, dependiendo de las necesidades del paciente. Durante la sesión, el terapeuta utiliza las manos de manera estratégica sobre los puntos energéticos del cuerpo del paciente, canalizando la energía universal hacia las zonas bloqueadas. A medida que la energía fluye, los bloqueos energéticos se disuelven, y el paciente experimenta una sensación de alivio y tranquilidad.
Es importante mencionar que una vez finalizada la sesión, el paciente puede sentirse ligero y lleno de energía, aunque algunos pueden experimentar una sensación de fatiga temporal. Esto es completamente normal y se debe a la profunda transformación energética que ha tenido lugar.